
Historia de la Manzana de las Luces
La Manzana de las Luces es una manzana histórica de Buenos Aires. Y es tan importante porque reúne varios de los edificios más antiguos de la ciudad. Fue llamada así, por primera vez, en 1821 por un periódico de la época llamado El Argos, en referencia a las instituciones intelectuales que funcionaban allí.
Entre estas, se puede mencionar el Colegio de San Ignacio, luego denominado Colegio de San Carlos, hoy Colegio Nacional de Buenos Aires, una de las escuelas secundarias más prestigiosas y de la que se han recibido intelectuales, políticos y muchas figuras prominentes de la historia nacional. Por su parte, la Iglesia de San Ignacio de Loyola fue la primera en la capital.
La Manzana de las Luces también albergó el primer teatro de la ciudad, el primer museo, la Real Imprenta de Niños Expósitos y la Biblioteca Nacional.
Además, la historia de la ciudad también pasa por debajo de la Manzana de las Luces. En la época colonial, se construyeron túneles, que se suponía que debían usarse tanto para la defensa como para el contrabando de mercancías.
Algunos dicen que la idea era conectar los diversos edificios de los jesuitas, pero el proyecto habría quedado inacabado cuando los religiosos tuvieron que abandonar la ciudad, expulsados en 1767. Otros piensan que fueron utilizados por sectas o grupos secretos, como la masonería. Aún no se sabe con exactitud para qué habían sido diseñados.